El Ayuntamiento de Biescas ha señalizado la 'Ruta de los búnkeress'.

El Ayuntamiento de Biescas ha señalizado la 'Ruta de los búnkeress', un recorrido por algunos de estos elementos fortificados que se construyeron en las inmediaciones de la localidad.

La edificación de estos elementos se produjo de forma planificada a lo largo del Pirineo para crear la denominada 'Línea P', letra que se corresponde con la inicial de la palabra Pirineos.

El Ayuntamiento pelaire acaba de concluir y poner a disposición de vecinos y visitantes, la señalización de la ruta, que parte de las proximidades del fuerte de Santa Elena.

Los búnkeres señalizados corresponden al 'Núcleo de Resistencia 106' que, con 16 asentamientos fortificados, suponía uno de los 20 núcleos con los que se estructuraba esta línea de defensa en Aragón, que constaba de más de 4.000 fortificaciones construidas entre 1944 y finales de los años 50 a lo largo de los 415 kilómetros de frontera pirenaica. Configuraba la mayor obra fortificada de la Península Ibérica y la mas importante levantada en Europa con posterioridad a la II Guerra Mundial.


POTENCIAL TURÍSTICO

El alcalde de Biescas, Luis Estaún, ha valorado el "potencial turístico" de este patrimonio, que se engloba en la oferta cultural y de ocio de la localidad, que además se encuentra enclavado en una zona de "elevado interés ambiental" y que ya cuenta con "importantes equipamientos culturales y deportivos", como es Santa Elena, con la ermita, el fuerte, la vía ferrata y el camino adaptado.

Esta iniciativa se ha llevado a efecto en colaboración con el Departamento de Desarrollo y Comarcalización de la Diputación de Huesca (DPH), se ha realizado una primera intervención con la instalación de los paneles informativos.

El primero de los paneles está situado al inicio de la ruta y explica qué es la 'Línea P' y la tipología de los asentamientos, mientras que el segundo se ubica a medio camino, frente a una de las fortificaciones más importantes de todas las construidas, destinada a albergar un cañón anticarro.

Una característica común de los búnkeres es que se encuentran perfectamente mimetizados con las rocas y vegetación del entorno, lo que unido a la falta de mantenimiento y la escasa definición de la documentación existente, que todavía está catalogada como secreto militar, hace que muchas de estas obras pasen desapercibidas.

En una segunda fase de la iniciativa se pretende desbrozar y limpiar las fortificaciones más cercanas a Biescas para que resulten accesibles y puedan complementar esta ruta.

Fuente: Europa Press.