Un proyecto soterramiento permitiría abrir un gran espacio peatonal entre las murallas y el barrio del Arrabal en Teruel.


Soterrar el tráfico en la ronda cuesta 4,6 millones, pero la financiación está en el aire
Soterrar el tráfico en la ronda de Dámaso Torán de Teruel para abrir un gran espacio peatonal superior que uniría el Centro Histórico con el Arrabal cuesta 4,6 millones de euros y las obras se podrían ejecutar en 12 meses. El proyecto, que responde a una promesa electoral del PSOE en 2002, ha sido recientemente entregado a la Consejería de Obras Públicas, según reconoció recientemente el titular de este departamento, Alfonso Vicente, en respuesta a una pregunta parlamentaria formada por el diputado del PP Miguel Ángel Lafuente.

La ejecución del soterramiento está condicionada a la disponibilidad financiera del Gobierno aragonés, ante la precaria situación financiera del Ayuntamiento. Alfonso Vicente admite en su respuesta parlamentaria que "no es posible estimar una fecha de inicio de obras ya que se trata de una infraestructura de titularidad autonómica". Sin embargo, desde el Consistorio señalaron que, sin financiación externa, es inviable acometer este costoso proyecto.

La portavoz del PP en el Ayuntamiento, Emma Buj, preguntó al alcalde, Miguel Ferrer, del PAR, en el pleno municipal celebrado ayer cuáles son las previsiones municipales respecto al soterramiento de la ronda de Dámaso Torán. Ferrer remitió su respuesta a la próxima sesión plenaria.

El alcalde reconoció tras el pleno que la ejecución depende de los fondos que pueda aportar la DGA. "De momento -admitió- no se pueden fijar plazos ni financiación". Aunque consideró "una buena idea" el soterramiento, señaló que deberá estudiar el proyecto con detenimiento y negociar su posible realización con el consejero de Obras Públicas.

Emma Buj señaló que eliminar el tráfico en la ronda para crear un amplio espacio peatonal fue una idea presentada "a bombo y platillo" por el PSOE en una campaña electoral, pero el proyecto lleva camino de "terminar olvidado en un cajón". La portavoz popular añadió que la indefinición sobre esta iniciativa "impide al Ayuntamiento debatir sobre el diseño de una zona de la ciudad que, con la entrada en servicio de la autovía Mudéjar, se ha convertido en la principal fachada del Centro Histórico". Buj agregó que la eliminación del tráfico de la ronda de Dámaso Torán entre el acueducto de Los Arcos y la calle del Tozal lleva camino de convertirse en "un proyecto virtual, que nadie se cree".

Las catas arqueológicas realizadas en la zona afectada no revelaron la presencia de restos importantes. El túnel, proyectado a 5 metros de profundidad, tendría 70 metros de longitud y enlazaría con una rampa de entrada de 45 metros y una de salida de 110. Dispondría de tres carriles con una anchura total de 14 metros. La redacción del proyecto ha costado 145.000 euros, aportados por la DGA.

Por otro lado, el pleno rechazó con los votos del equipo de gobierno PAR-PSOE una moción de CHA que reclamaba la agilización de las obras del Plan de Actuación Específico 2006-2008, así como un nuevo plan para la provincia. El portavoz de CHA, Paco Martín, criticó la "ralentización" de las principales infraestructuras previstas. El PP se abstuvo al entender que "no se puede pedir la aceleración de un plan inexistente". Ferrer, aunque votó contra la moción, se mostró decepcionado porque las obras se ejecuten "muy pasadas de tiempo".

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