Interesante articulo en el Diario del Alto Aragón sobre el castillo de Hospitaled en Espluguiello.

Espluguiello es el nombre de una población que hubo hace siglos en el Sobrarbe, entre Hospitaled, Eripol y Olsón. Para visitar sus restos, que pese al paso del tiempo tienen un carácter muy sugerente, iremos primero a Hospitaled. Hasta aquí hemos llegado tras tomar un desvío en la carretera A-2205, de Aínsa a Puente Buera por Alquézar, pasada la localidad de Bárcabo, si llegamos desde el sur o Almazorre si lo hacemos desde el norte.

Junto a uno de los dos cruceros que hay en Hospitaled, sale un camino señalizado que nos llevará a nuestro destino. El paseo, de unos 40 minutos sin prisas, discurre por una pista de tierra y solamente al final, muy cerca de nuestro destino, deberemos dejarlo. Bajaremos a un pequeño barranco que pasaremos sin problemas y, tras rodear unos campos de cereal, nos sorprenderán los restos de las torres del castillo de Espluguiello. Lo que queda de esta población está tan colonizado por la vegetación que casi no se ve hasta que lo tienes enfrente.

Aparecen los restos de un castillo, de una iglesia y de una población que aquí hubo hace siglos, cuyos habitantes utilizaron las rocas que emergían del suelo como base de sus casas y que labraron en la piedra hogares, habitaciones y canalillos para derivar el agua o aljibes y depósitos para guardar esa agua y los granos de la cosecha. Todo en un conjunto muy sugerente, salpicando el color verde del campo en la primavera.

En una de las rocas aparece una habitación excavada en la piedra. En otra, se observan los hueco realizados para colocar troncos que sustentaran la cubierta de la casa. En una habitación excavada en la roca parece que se labró también el espacio para el hogar. En otro punto, amontonamientos de piedras hablan de posibles viviendas de los habitantes de Espluguiello.
En una esquina del conjunto está la iglesia del pueblo. Es un edificio de sillares de piedra, con dos arcos apuntados en su interior y una puerta adovelada en una de sus fachadas. La maleza y las flores han sustituido el rezo de las gentes y casi es imposible pasar al interior entre los escombros y la vegetación.

En el otro extremo del conjunto, dos torres circulares indican que allí estuvo la fortaleza. Una tercera torre, de planta rectangular, completaba el conjunto, también invadido por la Naturaleza.
Según explica Adolfo Castán en su libro sobre los castillos de la provincia, editado por DIARIO DEL ALTOARAGÓN (2004), es un conjunto entre los siglos XII-XIII, tal vez sobre alguna obra anterior. Es un paseo muy curioso entre interrogantes, adivinando lo que pudo ser una comunidad medieval que, de repente, desapareció, dejando los restos más sólidos (castillo e iglesia) y evaporándose el resto.

El número 4 de la revista "Tierra bucho" (1998) incluye un artículo de Javier Valenzuela sobre Hospitaled. Sitúa el origen de esta población en su condición de mesón al servicio de la cabañera que iba a la tierra llana desde los valles de Broto, Vio y Solana. En un determinado momento se llamó Hospitaled de Esplubiello. Para este autor, Espluguiello sería la población principal. En un momento determinado, que fija en el siglo XV, se abandonaría, estableciéndose sus habitantes en lo que antes era un mesón al servicio de la ruta cabañera. Así considera que nacería Hospitaled.
Valenzuela ha encontrado restos de cerámica de diversas épocas en esta lugar, abundando la cristiana propia de los siglos XI y XII. Este autor considera que "queda muchísimo por descubrir en estos yacimientos cuasi-vírgenes de Espluguiello; son muchas las sorpresas que nos depara este sitio "único del Alto Aragón... Sólo falta que despierte el interés de quienes tienen el deber de investigarlo y consolidarlo".

José Cardús Llanas, el incansable viajero, estuvo por estas latitudes en más de un momento. Publicó en El Cruzado Aragonés (29 diciembre 1957) una colaboración titulada "Castillo de Hospitaled". En el texto relata la existencias de las torres, la iglesia y los restos de un poblado. Cita a Federico Balaguer, quien le indicó que "el castillo de Hospitaled existía ya en el siglo XI". En ese momento era más complicado que ahora llegar a este lugar, aunque se mantiene el hecho de que "la fortaleza no se ve hasta que se está muy cerca de ella".

Cardús tituló "Hospitaled, en la Barbitania" un artículo suyo, publicado el 24 agosto 1975 en su sección "Turismo Altoaragonés" del Heraldo de Aragón. Escribía que "no sé, hay algo especial, misterioso en el ignoto alto medievo de Hospitaled". Es un lugar sugerente, sin duda. En una soleada mañana del mes de mayo, con los campos del entorno luciendo el mejor de los colores verdes, la imaginación volaba en torno a esta población y su vida entre los siglos XI y XV. El canto de los pájaros completaba la escena.

Diario del Alto Aragón