El director general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Jaime Vicente, presentó ayer el Plan Director de Restauración del Castillo de Monzón, documento redactado por un equipo de la Universidad de Valencia con un presupuesto de 240.000 euros a cargo de la DGA. "Se trata de un estudio tremendo, excepcional, completísimo, que va a ser una referencia en este campo. De hecho, hay mucho interés por conocerlo en distintos sectores profesionales. Abarca todos los aspectos del monumento, detalla las patologías, establece el orden de prioridades a la hora de actuar y planifica la gestión y los usos", dijo Vicente. A su lado, varias cajas de "papeles" con un peso total de 80 kilos daban idea de la magnitud de un trabajo que ha durado dos años y ha involucrado a más de cincuenta personas.
Fernando Vegas, director del estudio junto con Camila Mileto, resumió el contenido del Plan a una audiencia formada por el alcalde y varios concejales, los miembros del Consejo Sectorial de Patrimonio y algunos ciudadanos. "Hay planes de restauración que se centran en el "objeto", como es el caso del redactado para la catedral de Victoria, y otros que atienden más al uso, como el de la Alhambra de Granada. En el del castillo de Monzón, las dos facetas nos han preocupado por igual. El estudio histórico ha barrido todos los archivos militares y descubierto documentos del siglo XVIII prácticamente desconocidos; el arqueológico define las diferentes épocas de construcción; el estratigráfico ha puesto de relieve los problemas del subsuelo de arcillas y arenisca; y el termográfico, el avance de las humedades. Incluso hemos utilizado el georadar para despejar dudas. Ahora conocemos con fidelidad las enfermedades de cada piedra y ladrillo", dijo el experto.
El viejo castillo con origen en el siglo IX alberga 80 tipos de muros, y en los sillares aparecen hasta 1.100 marcas de canteros. El agua ha sido y es uno de sus peores enemigos. La alteración del sistema de evacuación de pluviales, por ejemplo, ha causado daños en los pavimentos y el subsuelo. En el cerro menudean las cárcavas, y una de las primeras actuaciones ("de poco lucimiento pero necesaria", dijo Vegas) será la consolidación del terreno.
Vicente explicó que el Plan Director es fruto del acuerdo alcanzado con el Ministerio de Cultura para "rescatar" el Monumento Histórico-Artístico Nacional. "No se pueden hacer restituciones puntuales sin un plan director que las coordine y ordene porque incluso pueden ser contraproducentes. Ahora lo tenemos y el Ministerio empezará a encargar proyectos. El documento respeta escrupulosamente todas las épocas. En el capítulo de la gestión y los usos, el Ayuntamiento tendrá voz, por supuesto. En cuanto a la estatua del Sagrado Corazón, nadie discute que se trata de un elemento no militar y perturbador de la imagen de la fortaleza. Habrá que abordar esta cuestión en su momento", añadió.
Otro apunte que realza el contenido de 80 kilos de papeles: el plan de gestión y usos lo firma un equipo técnico que, recientemente, ha trabajado en Petra y varios monumentos de Siria. El Ministerio de Cultura quería tener garantías de la rentabilidad de sus inversiones, razón por la que pidió el Plan Director. Asumiendo la redacción, el Gobierno de Aragón ha puesto los cimientos de la restauración.
F.J.P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario